Este
departamento que se extiende en la ribera derecha del río Paraná cuenta con 30 distritos
municipales diseminados a lo largo de las rutas 1 y 6, con servicios turísticos de buena calidad.
Itapúa limita con los departamentos de Misiones,
Caazapá y Alto Paraná, y su capital es la ciudad de Encarnación, que con su costanera y hermosas playas sobre el Paraná son puntos de referencia
obligatorios e ineludibles del verano y también de todo el año.
El departamento de Itapúa es el depositario de tres
de las grandes reducciones jesuíticas que se existieron en el Paraguay: Santísima
Trinidad del Paraná, Jesús de Tavarangué (declaradas Patrimonio Mundial por la UNESCO en 1993), y San Cosme y San Damián. Santísima Trinidad ofrece el recorrido
cultural “Luces y Sonidos”; Jesús de Tavarangué, su imponente estructura
inconclusa; y San Cosme y San Damián; el agregado de su Centro de
Interpretación Astronómica “Buenaventura Suárez”.
Por la calidad y diversidad de su gente, por el
volumen y variedad de su producción y por su clima, este departamento es
conocido como “el crisol de razas”. En sus distritos viven colectividades de alemanes,
ucranianos, holandeses, belgas, japoneses, brasileños, eslavos, polacos e
inmigrantes de otras procedencias que se integraron totalmente a la forma de vida
nacional, pero sin perder sus rasgos culturales originarios, ofreciendo al
visitante su gastronomía variada que se suma a otros atractivos de la zona.